En esta técnica, como su nombre lo
indica, la actividad es el núcleo central de análisis. Esto implica un cambio
fundamental en la forma en que se piensa a la organización, ya que se abandona
la idea de establecer centros de costos y se pone el acento en los procesos que
se desarrollan.
Su objetivo final no es determinar
costos unitarios de actividades, sino que, unida al management basado en actividades, busca
determinar aquellas actividades que generan valor. Claro está que, como
menciona Podmoguilnye (1) la percepción acerca del valor diferirá según quién
sea que realice el análisis, pudiéndose establecer al menos tres grandes
grupos: "clientes", "dueños" y "recursos
humanos".
El ABC y el ABM
El costeo basado en actividades (ABC, por sus siglas en inglés), surgió en realidad como consecuencia de la aparición del ABM (Gestión Basada en Actividades), técnica que tiene como objetivo la gestión de las actividades, a partir de su identificación y conocimiento de los factores que consume y los resultados que produce. Así, la gestión basada en actividades, permite examinar a las organizaciones de manera horizontal, favoreciendo el análisis de los procesos.
El ABC revela cuáles son las
actividades que agregan valor, y cuáles son las que deben eliminarse o modificarse.
El concepto de actividad
Una actividad es un "conjunto de acciones coordinadas y dirigidas a añadir valor a los productos" (1).
Así considerada, debemos concluir
que no son los productos los que consumen factores de la producción, sino las
actividades.
La Teoría General del Costo define al costo como "todo vínculo coherente entre un objeto o resultado productivo y los factores necesarios para lograrlo". Este vínculo se da a través de los procesos de transformación que se realizan en la organización, que son, en definitiva, un conjunto determinado de actividades o acciones.
Desde la óptica del ABC, entonces, al poner el acento en las actividades se logra una comprensión integral de los procesos productivos.
La Teoría General del Costo define al costo como "todo vínculo coherente entre un objeto o resultado productivo y los factores necesarios para lograrlo". Este vínculo se da a través de los procesos de transformación que se realizan en la organización, que son, en definitiva, un conjunto determinado de actividades o acciones.
Desde la óptica del ABC, entonces, al poner el acento en las actividades se logra una comprensión integral de los procesos productivos.
La vinculación entre factores y
actividades se establece a través de Cost
Senders o inductores de factores de costos. A su vez, el vínculo entre
actividades y productos se determina mediante los Costs Drivers o inductores de costos.
Jerarquías de actividades
Es posible distinguir al menos
cuatro niveles o jerarquías de actividades.
En primer lugar tenemos a las
funciones, relacionadas con los objetivos de mayor nivel de la empresa:
producir, vender, distribuir, etc.
Luego encontramos a los procesos,
conjuntos de acciones a través de los cuales se lleva a cabo una acción.
Las operaciones son actividades por
medio de las cuales se desarrollan procesos.
Finalmente, las tareas son las
microactividades necesarias para cumplir operaciones.
Estas jerarquías llevan a la
determinación de costos a diferentes niveles:
·
Nivel unitario (unidades finales)
·
Nivel de lote
·
Nivel de líneas de producción
·
Nivel de infraestructura de planta
Cost Senders y Cost Drivers
El ABC pone el foco en los costos
indirectos, cuya magnitud es cada vez mayor en las estructuras de costos de las
organizaciones. Los materiales directos se asignan directamente a los productos
finales, mientras que el resto de los factores se asignan a las actividades, a
través de inductores denominados Cost
Senders.
Los Cost Drivers son las unidades a través de las cuales se mide el
nivel de producción de cada actividad y vinculan a cada una de ellas con los
productos finales, siendo la forma en que se puede medir la eficiencia de la
organización.
Etapas en el diseño de un modelo de costos ABC
Como se dijo anteriormente, al tener el ABC a la actividad como unidad de atención, son los procesos que se llevan a cabo en el interior de las organizaciones, objetivos de análisis de nivel superior.
Por ello, la primera tarea previa a la implementación de un sistema de costos ABC es establecer el mapa de procesos.A partir de este mapa, se deben detallar las actividades que los componen, apareciendo así, actividades vinculadas a los objetivos finales y actividades de apoyo.
Luego se deben establecer los factores consumidos por cada actividad, y su cuantía.
Posteriormente se deben seleccionar las unidades que permitirán medir el nivel de servicio de actividad.
Luego, para el caso de las actividades de apoyo, se determinarán las cantidades (medidas en las unidades de servicio o cost drivers establecidas) consumidas por las actividades principales o vinculadas a los productos o servicios finales.
Para el caso de las segundas, se determinan las cantidades de unidades de servicio consumidas por estos productos o servicios.
Por último, se determinan los costos de los objetivos finales de costeo.
Ver "El costeo objetivo" http://mundocostos.blogspot.com.ar/2015/07/el-costeo-objetivo.html
(1) Podmoguilnye, Marcelo. El costeo basado en actividades, Ed. La Ley, Buenos Aires, 2004
(2) Peralta, Jorge. La gestión empresarial y los costos, Ed. La Ley, Buenos Aires, 2006